Klaus Schwab dijo recientemente algo que hizo que la gente se sentara y se diera cuenta:
Inteligencia artificial, pero no solo inteligencia artificial, sino también metaverso, tecnologías del espacio cercano, y podría ir mucho más allá: biología sintética. Nuestra vida dentro de diez años será completamente diferente, cambiará mucho, y quien domine estas tecnologías será en cierto modo el dueño del mundo.
Aquí está el problema: no está equivocado. La gente se enoja cuando escucha frases como "señor del mundo", pensando que es una amenaza vacía, poco más que el estruendo vacío de un megalómano. Definitivamente no lo es. La razón por la que las personas no ven de lo que es capaz esta tecnología es en parte porque no están dotados de una imaginación hiperactiva, en parte porque no están acostumbrados al pensamiento holístico de los sistemas y, finalmente, porque es tan buena que no hay cobertura de los principales medios. de la biología sintética porque si existiera la gente haría una rabieta.
Ahora te voy a preguntar algo que te puede parecer un poco extraño. ¿Qué es un órgano interno? La respuesta del libro de texto es que es un tejido especializado en el cuerpo que realiza una función específica. Pero, ¿y si te dijera que un órgano interno puede ser cualquier cosa que queramos que sea?
RSC – Un morfoespacio para órganos sintéticos y organoides: lo posible y lo real
Los esfuerzos en biología del desarrollo evolutivo han arrojado luz sobre cómo evolucionan los órganos y por qué la evolución ha favorecido ciertas estructuras sobre otras. Estos avances en la comprensión de la organogénesis junto con las últimas técnicas de cultivos organotípicos, bioimpresión de tejidos y biología sintética ofrecen la oportunidad de romper las limitaciones físicas y genéticas en el desarrollo de órganos, abriendo así nuevas vías para la investigación en forma de entornos completamente diseñados o simplemente modificados. . Aquí proponemos un marco unificador que conecta el concepto de morfoespacio (es decir, el espacio de estructuras posibles) con la biología sintética y la ingeniería de tejidos. Nuestro objetivo es una síntesis que incorpore nuestra comprensión de las limitaciones evolutivas y arquitectónicas y que pueda servir como guía para explorar principios de diseño alternativos para la construcción de organoides y órganos artificiales. Presentamos un espacio de morfología tridimensional que contiene tres características clave para la complejidad de los órganos y organoides. Los ejes de este espacio incluyen el nivel de complejidad introducido por los mecanismos de desarrollo necesarios para construir la estructura, su potencial para almacenar y responder a la información y el estado físico subyacente. Sospechamos que gran parte de este espacio está vacío y que este vacío puede ofrecer pistas sobre formas alternativas de diseñar e incluso inventar nuevos órganos.
Más sobre esto en el artículo: Asociaciones público-privadas para Mad Science: la conspiración en curso para remodelar la humanidad